Este viernes otro terrible hecho ha ocurrido en Ucrania, cuando el ejército ruso bombardeó un edificio residencial en Serhiivka, Odesa. Este ataque suma el contador de los crímenes de lesa humanidad que Rusia ha cometido desde que empezó la invasión a Ucrania. El país aún no se había terminado de recuperar luego de que hace unos días un misil cayera en un centro comercial lleno de personas.
El saldo del ataque fue de 21 personas muertas, entre ellas, 6 niños. Dos misiles rusos habrían alcanzado el edificio residencia del 9 plantas, dañando también otro edificio cercano. Esta ciudad se encuentra alejada del centro del conflicto, por lo que no se sabe porque Rusia habría decidido atacar.
Este brutal ataque ha causado pánico en esta localidad, la cual se habría mantenido relativamente segura desde el inicio de la guerra. Por su parte, el gobierno ruso asegura, como de costumbre, que ellos no han tenido nada que ver con el ataque. Sin embargo, el edificio destrozado en Serhiivka dice todo lo contrario.
Los testigos aseguran que despertaron con un gran estruendo y vieron el edificio en llamas. Toda la comunidad intentó ayudar, pero al final se perdieron muchas vidas.
La fiscalía recaba información sobre los crímenes de guerra cometidos por el ejército ruso
La fiscalía de Odesa llegó al lugar para recabar la evidencia de este nuevo crímen cometido por el ejército ruso. El fiscal Serhill Kostenko será el encargado de investigar los hechos para determinar responsabilidades.
Además de lo 21 fallecidos, también habrían 38 heridos, así como muchas personas que lo perdieron todo en ese ataque. Por fortuna, en ese edificio quedaban pocas personas, ya que de haber estados todas las familias en el lugar, la pérdida de vidas habría sido mayor.
El lugar se encuentra resguardado por ejército ucraniano y la fuerza aérea de Ucrania ha desplegado un operativo especial para resguardar los cielos de Serhiivka.