El líder laborista Sir Keir Starmer y la diputada Angela Rayner han sido absueltos por la policía de Durham de infringir las normas de cierre. Esto se debe a una investigación sobre un evento en la oficina de un diputado laborista en abril de 2021.

En un comunicado, la policía dijo que "no había ningún caso que responder", citando una exención a las normas de cierre para el "trabajo razonablemente necesario". Sir Keir dijo que habría renunciado a su cargo si hubiera sido multado como "cuestión de principios", añadiendo que "la integridad importa".

"No debería ser controvertido decir que los que hacen la ley no pueden incumplirla", dijo en una rueda de prensa.

Dijo que en los próximos días expondría cómo un gobierno laborista "reiniciaría nuestra economía, reanimaría nuestras comunidades, revitalizaría nuestros servicios públicos y daría a Gran Bretaña el nuevo comienzo que necesita".

Sir Keir ha dejado su destino político en manos de la policía

Esta decisión es importante porque dice quién dirigirá el Partido Laborista en las próximas elecciones generales. Hasta hoy, eso estaba lejos de ser seguro: un colosal botón de pausa pulsado en el futuro de Sir Keir; su destino político en manos de los detectives del condado de Durham.

Había decidido en mayo que una multa equivaldría a su dimisión; en consonancia con su demanda de que debería haber significado lo mismo para Boris Johnson. Ahora puede retomar, y lo hará, su argumento de que no todos los políticos son iguales; que la integridad importa.

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Argumentará que el contraste es ahora más marcado que nunca en comparación con el Sr. Johnson. Pero aunque hoy se sienta muy aliviado, esta es también la semana en la que su mayor reto político, convertirse en primer ministro, se ha hecho un poco más difícil.

Ya que tras definirse en oposición a Boris Johnson, ahora se enfrenta al blanco móvil de una serie de posibles oponentes. Tendrán -al menos durante un tiempo- el brillo de la novedad, aunque sin mandato propio. Pero puede que no le ofrezcan el mismo margen de crítica que ha tenido en los últimos meses con el primer ministro.